jueves, 16 de febrero de 2012

El Puff Pera, ideal para acoger a los amigos


El puff puede ser la solución ideal para rellenar espacios de la casa que de encuentren demasiado vacíos o desangelados. Es una forma de vestir cualquier habitación y es perfecto tanto para nuestro salón como para el cuarto de los niños.


Para nuestro salón


Sentarse en uno de estos asientos es una experiencia cómoda que sus invitados apreciarán mucho más que una silla dura. Un puff pera nos soluciona mucho cuando tenemos invitados en casa y nos cuesta acomodar asientos suficientes.
Con un puff pera conseguirás crear un ambiente distendido y cómodo cada vez que tus amigos vengan a casa. Tomar el café o un aperitivo sentados él es una manera de generar cercanía y confianza con los demás.
Para incorporar un puff en nuestro salón, hemos de encontrar el el color y el materia adecuado que vaya en concordancia con el resto de la decoración. Existen puffs elegantes y formales y otros más divertidos y juveniles. Una amplia gama dónde poder el elegir según nuestros gustos.


Para el cuarto de los niños


Solemos asociarlos con los niños porque al final es donde acaban acomodándose para jugar o para descansar. Tanto a ellos como a sus amigos les encanta tirarse sobre él amoldando las formas del puff con su cuerpo. Por otra parte, al ser tan fácil de trasladar y de almacenar en cualquier lugar podemos guardarlo bajo la cama y sacarlo cuando sus hijos traigan invitados. Es muy fácil encontrar puffs de colores alegres y divertidos para ellos.



Tu hogar, tu estilo


La modernidad no se puede definir de manera objetiva. Si cada uno pensaramos ahora en un hogar moderno seguro que ninguna de nuestras ideas se asemejaría demasiado. Para unos la modernidad está en una decoración minimalista o en el color blanco, para otros lo está en la decoración multicolor, algunos lo asocian a un diseño rompedor y otros a un diseño sencillo. Y es que mejor que hablar de modernidad se ha de hablar de estilos, pues al fin y al cabo lo moderno se convierte en un concepto muy subjetivo.

Lo que realmente importa entonces es que te sientas identificado con tu hogar, que te veas reflejado a través de cada pared, cada cuadro, cada mueble. En definitiva, que muestre tu propia personalidad. Pero nosotros cambiamos y nuestros gustos también ¿Qué hacemos entonces con nuestro hogar? La decoración del principio no refleja la persona que soy ahora. Por eso, si no disponemos de demasiado dinero, la mejor opción para no cansarnos y aburrirnos pronto, es optar por una decoración neutral, minimalista y no muy cara. De manera que te permita poco a poco ir adaptándola a tus nuevos gustos, darle un nuevo look.

Uno de los muebles que más nos puede condicionar es el sofá. Hay cuatro cosas que hemos de tener en cuenta a la hora de elegirlo: la comodidad, la calidad y resistencia y el diseño.

Es importante elegir un sofá que sea duradero. En uno de los muebles en los que sí merece la pena hacer una buena inversión. Más adelante te daré algunos truquitos para que puedas darle toques diferentes y no llegues a cansarte. Aconsejo siempre porque los sofás de piel reunen estas cuatro características y duran muchísimos años. Una de las tiendas de Madrid que trabaja con las mejores marcas es Piel Mart. Nombro esta porque es una de las más conocidas y podemos encontrar sus tiendas repartidas por todo Madrid pero también podemos adquirir sofás de piel en la tienda Natuzzi, Atico o Divatto entre otras.

Entre los diseños qué más están arrasando ultimamente se encuentra el sofá Chaise Longue, o a veces mal escrito en español como "cheslong". Los Chaise Longue se incorporan como suplemento fijo en el extremo del sofá normal convirtiéndolo en sofás rinconera. Resulta muy cómodo para descansar, ya que soporta el cuerpo entero. Se convierte así en el rinconcito preferido para leer, tomar la siesta o ver una película.

Una vez elegido el color que más nos guste le podemos dar diferentes toques a lo largo de la vida del sofá, cambiando los cogines, las lámparas de mesa o poniendo alguna tela o manta bien colgando de un extremo o bien a modo de funda protectora.